La paciencia es propia del oficio de jardinero, y del buen cuidador.
Hoy existe la tendencia a resolver todos los problemas rápidamente, asumiendo pocos costes. No sabemos esperar, somos impacientes. La impaciencia es “la incapacidad de resistir el ritmo de las cosas, la cadencia de los acontecimientos, el paso que llevan los demás, el tiempo que exige cada actividad”. (F. Torralba) Todo lo cual requiere tener paciencia, constancia y esperanza.